Esta técnica, viene a ser para el audio lo que la holografía para la imagen, y la verdad es que los efectos conseguidos son realmente espectaculares.
Para conseguir que el cerebro sea capaz de adivinar la posición de la fuente de sonido, se graban las secuencias de cada oído independientemente empleando una cabeza de dummy con dos micrófonos a la altura de cada oreja (véase foto). Luego ambas grabaciones se recombinan usando un algoritmo llamado Cetera, y el resultado se emite por un único canal.
Se supone que esta técnica imita a la forma que nuestro cerebro sigue para procesar el sonido, es decir a la escucha binaural (ojo, no confundir la holofonía con el estéreo: sonido que se emite por dos canales).
¡¡Escuchen esto, es impresionante!! (Utilicen audífonos para que entre en función la holofonía).
Esta nota fue obtenida de: Mikael´s Nai blog
No hay comentarios:
Publicar un comentario